
El Cretácico del borde meridional del Sistema Central: unidades litoestratigráficas y secuencias deposicionales
Author(s) -
Javier Gil,
Adán Pérez García
Publication year - 1996
Publication title -
estudios geológicos
Language(s) - Spanish
Resource type - Journals
SCImago Journal Rank - 0.276
H-Index - 27
eISSN - 1988-3250
pISSN - 0367-0449
DOI - 10.3989/egeol.96521-2252
Subject(s) - medicine
The Central System is an alpine rejuvenation of the hercinian base of the Iberian Plateo The landward ends of the cretaceous carbonate platforms of the Iberian Basin croup out along the southern margino Near to the Iberian Range (NE), the cretaceous sediments are composed of shallow marine and litoral carbonate deposits. They grade towards the basin boundary (Central System) into a litoral and continental terrigenous facies. An important reduction southward of the thickness of the sedimentary succession is recognized. The stratigraphic record is organized in sixteen lithostratigraphic units and in nine depositional sequence, that can be correlationed with the chart of cycles global of Haq et al. The age of the studied deposits are Cenomanian to Campanian. The stacking pattern is agradational, with a onlap not very marked in the base, a truncation and an internal uncorformity in the Santonian age. The thickness and facies changing is due to sinsedimentary faults within a distensive context, that have a little vertical displacement. They are younger outward of the sedimentary basin. El Sistema Central es un rejuvenecimiento alpino del zócalo hercínico de la Placa Ibérica. En su borde meridional afloran las terminaciones hacia el continente de las plataformas carbonatadas cretácicas del Surco Ibérico. Los depósitos cretácicos, en las proximidades de la Cordillera Ibérica (NE) son carbonatados, de ambientes litorales y marinos someros; mientras que hacia el interior de la Placa Ibérica, pasan a depósitos terrígenos, de medios litorales y continentales. Hay también una importante reducción de los espesores en esa misma dirección. El registro estratigráfico se organiza en dieciséis unidades litoestratigráficas y en ocho secuencias deposicionales, que se correlacionan con la carta de ciclos globales de Haq et al. Los materiales estudiados abarcan desde el Cenomanense al Campaniense. La estructura de apilamiento es agradacional, con un onlap poco marcado en la base, una truncación y una discordancia interna en el Santoniense. Las variaciones de espesor y de facies son controladas por fracturas sinsedimentarias, en un marco distensivo. Ellas tienen poco salto y son más modernas hacia el exterior de la cuenca sedimentaria