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Traumatismo encefalocraneano moderado: un nuevo enfoque clínico para un término inadecuado
Author(s) -
Sergio Aguilera Rodríguez,
Sebastián Iglesias Vargas
Publication year - 2021
Publication title -
revista chilena de neurocirugía
Language(s) - Spanish
Resource type - Journals
eISSN - 2452-5553
pISSN - 0716-4491
DOI - 10.36593/revchilneurocir.v46i3.270
Subject(s) - humanities , medicine , philosophy
El traumatismo encefalocraneano moderado es un grupo de pacientes muy heterogéneo y su mortalidad puede llegar hasta 15%, por lo que el término moderado debería ser reemplazado por traumatismo encefalocraneano potencialmente grave. Su evolución y pronóstico depende de una serie de factores que deben ser evaluados correctamente en la atención hospitalaria inicial del enfermo: edad, puntuación en la Escala de Glasgow, Escala tomográfica de Marshall y tipo de lesión intracraneana. Estos factores se relacionan fuertemente con la evolución del enfermo y las secuelas neurológicas posteriores. Lesiones como la hemorragia subaracnoidea traumática y especialmente la presencia de contusiones cerebrales están asociadas a secuelas neuropsicológicas que pueden ser muy invalidantes para los pacientes. Ahora bien, se deben distinguir al menos dos grupos de pacientes con TEC potencialmente grave: aquellos con Glasgow 11-13 y los pacientes con Glasgow 9-10 puntos. Este último grupo, de alto peligro de mala evolución clínica, si se asocia a una Tomografía Marshall III y IV inicial debieran ser considerados como traumatismo encefalocraneano grave desde la admisión. Un grupo de autores diseñó una categorización “tipo luces del semáforo” utilizando la Escala de Glasgow y la Clasificación de Marshall, lo que facilita reconocer al grupo de pacientes con más riesgo de mala evolución. Dentro del manejo neurointensivo, se debe recalcar la prevención de la hipotensión e hipoxia, la oportuna evacuación de lesiones ocupantes de espacio, el control intensivo de las variables fisiológicas y la neuromonitorización multimodal en el grupo de mayor riesgo. Todas estas medidas lograrán disminuir la mortalidad y mejorar el pronóstico de un grupo de pacientes cuya injuria cerebral primaria no determinó un daño cerebral inicial devastador.