Carga de la prueba en los casos de responsabilidad civil por mala praxis médica

Una de las funciones principales de la institución de la responsabilidad civil es reparar el daño sufrido por la víctima a través de un resarcimiento económico. Sin embargo, para que la víctima del daño producido como consecuencia del ejercicio de una actividad profesional pueda obtener la reparación del causante del daño, es preciso que se haya acreditado en el proceso judicial instaurado,  aparte de la existencia del daño y la relación causal, los factores de atribución, que pueden ser subjetivos, es decir, cuando existe dolo o culpa; u objetivos, cuando se prescinde de ellos. El presente artículo se enmarca dentro del factor de atribución, que para este caso es de carácter subjetivo, se analiza la carga de la prueba de la culpa inexcusable en la responsabilidad civil por mala praxis médica ocurrida en las instituciones sanitarias; más específicamente, se analiza sobre quién debe probar que el daño producido al paciente se debió o no a una culpa inexcusable del profesional de la salud.