Notas para un Modelo de Docencia.

Una de las acciones que requieren las instituciones formadoras de docentes es revisar la parte reflexiva de nuestro quehacer docente, siendo este aspecto uno de los elementos que a nuestro juicio consideramos relevantes en el proceso formativo de los docentes, y de los mismos docentes formadores de docentes, por el hecho de que hoy día mejorar las prácticas educativas, parte de esta basa y de ahí la orientación a la preparación profesional. Por un lado solo se le ha priorizado lo curricular y lo instruccional para favorecer la enseñanza y el aprendizaje. Y no está mal pero se requiere que todos los docentes nos sometamos a una forma más interactiva con nuestra práctica, sobre todo que las instituciones formadoras de docentes, no solo han perfilado en sus perfiles académicos profesionales que nunca se imaginaron que ingresarían a la docencia y que por el simple hecho de ser profesionales, no se someten a un proceso formativo y reflexiva también de sus propias prácticas, por lo que mucho de lo que se orienta en los alumnos futuros maestros, no impacta más allá de las aulas. Esta propuesta un tanto idealista, en lo personal nos ha brindado una nueva perspectiva sobre hacia dónde tendremos que caminar todos los involucrados: como docentes formadores y para los futuros docentes a quienes formamos.