
OPORTUNA TOMA DE DECISIONES EN LA GESTIÓN DE CONSERVACIÓN DE LA CARRETERA
Author(s) -
Edgar Vicente Armas
Publication year - 2012
Publication title -
revista de investigacion de la facultad de ciencias administrativas/gestión en el tercer milenio
Language(s) - Spanish
Resource type - Journals
eISSN - 1609-915X
pISSN - 1560-9081
DOI - 10.15381/gtm.v15i29.8788
Subject(s) - humanities , physics , geology , art
El ciclo de una carretera está conformado por 4 fases: A) El de la construcción que puede ser sólida o con algunos defectos, una vez concluidas entran en servicio. B) El de deterioro lento y poco visible; el camino va experimentando un desgaste, principalmente en la superficie pavimentada y en menor grado, en el resto de su estructura. Esto se produce por la gran cantidad de vehículos pesados y livianos que circulan en él y por acciones propias del clima y otros factores, en esta fase la conservación vial es nula. C) Deterioro acelerado y quiebre; al inicio de esta fase, la estructura básica del camino aún sigue intacta. A medida que va avanzando esta fase, comienza a deteriorarse la estructura básica, que no es visible. Estos daños comienzan siendo puntuales, y luego se van extendiéndose hasta que finalmente afectan la mayor parte del camino, periodo entre dos y cinco años. Al inicio de esta fase se debe iniciar la conservación de la carretera cuyo costo es el 10% de la construcción original. D) Descomposición total; se caracteriza por la pérdida del pavimento, cada vez que pasa un vehículo pesado se desprenden trozos de capa asfáltica, hasta que al final termina siendo un camino de grava y a la larga, de tierra. Los vehículos comienzan a experimentar daños en los neumáticos, ejes, amortiguadores y en el chasis. En general, los costos de operación de los vehículos suben de manera considerable y la cantidad de accidentes graves también aumenta. Existe un momento de preciso para efectuar ciertos trabajos de conservación de una carretera, en el caso de un camino con pavimento asfáltico. La toma de decisión para el refuerzo de las superficies debe efectuarse al principio de la fase C. Sin embargo, mucho más grave es si se pasa del momento oportuno para intervenir y los trabajos de conservación necesarios se postergan. El atraso, tanto en el refuerzo como en el mantenimiento rutinario, produce daños en la estructura básica del camino. En este caso, la pérdida es mucho mayor, pues el tipo de intervención necesaria será de rehabilitación, que tiene un costo mucho más alto que el correspondiente a trabajos efectuados de manera oportuna.